INCIERTO FUTURO

      Caminaba por la calle, pensando en mis cosas, que últimamente no son muy alegres, cuando me encontré por casualidad con la hija de una amiga, que hace tiempo no veía.
      Después de los saludos de rigor y de comprobar que sigue siendo tan guapa y simpática como siempre y de interesarme por el devenir de sus padres y hermanos, hablamos cómo no del gran problema que tienen los jóvenes en los tiempos que corren:
     " LA FALTA DE EMPLEO". Me explicó no sin cierta gracia y desparpajo que ella había sido MILEURISTA, y que a pesar de tener una CARRERA UNIVERSITARIA, y algún MASTER, no ha conseguido un empleo digno del gran sacrificio que han hecho ella y sus padres conjuntamente, para su futuro porvenir.
     La generación mejor preparada de la historia casualmente, tiene las peores perspectivas de futuro, suele ser un/a joven de 25 a 35 años, que no tiene casa, ni coche, ni futuro en pareja, ni hijos, vive al día, y como me dijo la citada señorita, ( con la ayuda de sus padres), pues ahora ya no trabaja, la despidieron de la tienda de ropa en la que trabajaba de dependienta y aunque dice que salen ofertas, son tantos los que se presentan, que siempre hay alguien más preparado que tú y además son trabajos por debajo de su expectativa laboral de acuerdo a sus conocimientos académicos,! Un horror vamos!.
      Me comentó que tanto ella como sus amigos, ya se conforman con un sueldo inferior a mil euros.
      Alguno de sus compañeros de estudios, ya lo tiene, y se siente doblemente frustrado, pues la mayoría desearían no depender de los padres y poder mantenerse por ellos mismos y es por éste motivo que acceden a sueldos más bajos, porque depender de sus progenitores, que en algunos casos también están en condiciones de precariedad es realmente angustioso.
       YO, no pude negarle la razón y agregué que no entendía, qué culpa tenía el españolito de a pié con las especulaciones del MERCADO ECONÓMICO, la PRIMA DE RIESGO, y demás cosas que escuchamos a diario en los distintos medios.
       Resumiendo, las dos estábamos de acuerdo en que hoy día tener un trabajo es una suerte, aunque sea MILEURISTA, minimizado.
      NOS despedimos deseándonos suerte mutuamente, aunque con pocas esperanzas de solución a corto plazo, siempre es un placer hablar con los jóvenes, suyo será el futuro, pero... ¿Qué clase de futuro?...