Cada año, lógicamente espero regalos sorpresa, de parte de mi familia, y siempre me compensan con creces mis expectativas.
Este, no fue menos, pero se hizo de rogar, pues hasta bien tarde, no tuve la gran sorpresa.
Durante toda la tarde estuve esperando, la visita de mi hijo mayor y su novia, para pasarla juntos, así que, cuando mi hijo pequeño llegó de trabajar, pasadas las 9 de la noche, y llegó sólo, la verdad es que me desilusioné bastante, pero por otro lado tenía la convicción de que alguna cosa se avecinaba, y así fue, pues mi hijo pequeño nos había dicho a su padre y a mí que nos arreglásemos para ir a cenar fuera, y así lo hicimos.
Salimos los tres hacia el Restaurante, y al entrar en dicho establecimiento, tuve la gran sorpresa de que me esperaban allí puestos en pié mi hijo y su novia.
Y ALLÍ empezaron las sorpresas, me habían preparado una bonita mesa con un gran centro de flores secas y en la silla destinada a mí, habían dos globos, !Casi como una reina!, me colocaron un distintivo con número y !A cenar!, NO PODÍA ESTAR MÁS FELIZ.
Acabada la cena me dieron algunos regalos, mi hijo pequeño el disco de PABLO ALBORÁN, último, y mi hijo mayor y novia una cajita con CONCHAS DE MAR y distintos broches de bisutería con motivos MARINOS, una TORTUGA, una ESTRELLA DE MAR, un CABALLITO DE MAR, y un llavero con un PEZ, no es un secreto soy !PISCIS!.
Además de una targeta de FELICITACIÓN, de lo más cariñosa de los tres.
Y llegó la hora del postre...!OTRA SORPRESA!, mi adorable HELENA, novia de mi hijo mayor, me había hecho una TARTA, que tenía forma de PEZ, magnífica y soplé las velas, deseando que todos los AÑOS, que si DIOS QUIERE, quedan por venir sean tan felices como el presente, con mi adorada FAMILIA conmigo, arropándome.
Al llegar a casa, me esperaba otra sorpresa, un EQUIPO DE MÚSICA, para escuchar todos mis CDs, mientras me relajo en el sofá.
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